Llega septiembre y con él, un nuevo curso montañero

La vuelta al colegio, los coleccionables, los cursos de idiomas, dejar de fumar,… Muchos son los propósitos para el nuevo curso. Si te planteas practicar algún deporte, ésta puede ser tu página.

Efectivamente, durante los meses de verano hemos descansado cuerpo y mente y llegamos a septiembre con las pilas recargadas, y con el ímpetu necesario para lanzarnos a realizar alguna nueva actividad.

Un propósito muy habitual es el de deshacerse de esos kilitos de más en los que se han convertido las paellas del chiringuito, las cervecitas que acompañaban a la paella o las barbacoas de aquella excursión al monte. Por ello, muchos deciden este septiembre apuntarse al gimnasio o ponerse a dieta. Pero, ¿y si encontramos un deporte sano, saludable y que se pueda disfrutar al aire libre? El senderismo y la montaña pueden ser entonces tu nueva afición.

Los requisitos no son exigentes: ropa cómoda (y resistente a prueba de zarzas traicioneras), un calzado apropiado (lo mejor, botas de monte), un bastón que descargará esfuerzo de las rodillas y una mochila donde meter lo esencial: ropa de repuesto (nunca se sabe), un botiquín básico (tiritas, Betadine, gasas, etc.), agua, bocadillo y poco más. Aunque un artículo que publicamos hace unos meses explica todo esto mucho mejor.

¿Y la recompensa? Aparte de los efectos de una jornada de ejercicio aeróbico y sus beneficios a nivel cardiovascular, disfrutar de un paseo por plena naturaleza y, una vez en la cima, unas vistas de postal (si la niebla no lo fastidia todo, claro).

El premio de la cima: el paisaje que te rodea.

El premio de la cima: el paisaje que te rodea.

Pero como decíamos al principio, ésta también suele ser época de comenzar coleccionables. Pues bien, la montaña también tiene sus colecciones particulares. Nosotros en concreto estamos embarcados en el Concurso de los Cien Montes, uno de los muchos concursos de montaña que existen, por lo que además de hacer montañismo, coleccionamos montes.

Así, tenemos en nuestro haber el emblemático Gorbea, techo compartido por Bizkaia y Álava/Araba. O el fronterizo Alén, a caballo entre Bizkaia y Cantabria. También el guipuzcoano Hernio, con su cima sembrada de cruces. Y Sierra Sálvada, desde cuyos más de 1.000 metros se domina todo el valle de Orduña.

Mapa de montes centenarios

Y cómo no, nosotros también hacemos nuestras promesas. Así, entre nuestros objetivos, están subir al encartado Kolitza, ascender al casi-milenario Ganekogorta y asomarnos a Ogoño y ver si, como dicen, sus vistas son únicas.

Sea como fuere, desde Biendealtura.com te animamos a que te unas a esta fantástica afición y, si nuestros artículos te parecen interesantes, nos añadas a tu lista de favoritos o a tu lector de RSS.

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