Desde Getxo hasta Plentzia. Un paseo entre bosques y acantilados

Hoy os proponemos una ruta para toda la familia, válida, como los juegos EDUCA, de 0 a 100 años.

Comenzamos en Aixerrota, Getxo (Km 0). Para llegar, lo mejor es hacer uso de Metro Bilbao (Línea 1) y apearse en Bidezabal. Una vez en el exterior del suburbano, tomamos la calle Bidezabal en dirección oeste y, pocos metros después, la avenida del Ángel de Getxo, que nos conducirá al principio del bidegorri por donde transcurre el primer tramo de nuestra ruta.

Justo en los primeros metros del bidegorri encontramos el molino de Aixerrota, sede del ya tradicional Concurso Internacional de Paellas, que se celebra cada año en julio. Y, aparte del citado molino, lo primero que vemos es la cantidad de gente de todas las edades que transitan este paseo, bien andando, bien en bicicleta, bien en patines.

¿Aquello es un molino o un gigante?

¿Aquello es un molino o un gigante?

Caminamos un poco más (Km 1,2) y pasamos junto al fuerte de La Galea, antigua edificación militar a punto de ser conquistada por la vegetación que trepa por sus muros. De momento el mar solo nos ofrece vistas del Superpuerto de Bilbao y de los ya visitados Serantes y Punta Lucero.

Y un poco más adelante finaliza (Km 2) el carril exclusivo para bicicletas, por lo que todos los usuarios pasan a compartir el mismo camino (aunque muchas bicicletas optan por los senderos a través de las campas, mucho más cerca de los acantilados).

Molinos y veleros a favor de viento.

Molinos y veleros a favor de viento.

El murmuro de las olas rompiendo contra las rocas será compañero de viaje hasta llegar a Sopelana. Mientras, nos paramos a observar el perfil de la costa, abrupto e imponente soportando el embate de las olas, que solo consiguen convertirse en espuma en su desigual lucha. Aunque la bravura de las olas no es baldía, ya que es aprovechada por decenas de surfistas que cabalgan sobre sus crestas [mode poetic off] :-P.

Surcando las olas.

Surcando las olas.

Y así, casi sin darnos cuenta, llegamos a Sopelana (Km 5,5), donde el paseo finaliza junto a la playa de Barinatxe, también llamada La Salvaje.

Pero nuestra ruta no acaba aquí y enfilamos camino del casco urbano de Sopelana. Para ello, tomamos la calle Solondota y la avenida Arriatera, que cuentan con un carril bici, hasta llegar a carretera BI-634, por donde giramos a la izquierda y la recorremos unos metros antes de girar a la derecha por la calle Aquilino Arriola, calle que conduce al centro del pueblo, donde hay una oficina de información turística (Km 8).

GR 280

Quien quiera poner fin aquí al paseo, puede tomar el metro, cuya parada se encuentra a pocos metros. Pero nuestras piernas piden más y por ello seguimos de frente por la calle Mendieta, en busca del GR 280. Y así encontramos las primeras marcas, junto a la casa de cultura Kurtzio.

GR 280, un viejo conocido.

GR 280, un viejo conocido.

Seguimos las marcas, las cuales son abundantes haciendo imposible errar la dirección hasta que, junto a la entrada a una casa, el sendero se introduce entre una maraña de árboles y arbustos. Como diría Axl Rose, “Welcome to the Jungle”.

A partir de aquí (Km 10,2), el sendero discurrirá por un bosque atravesado por un arroyo, en total contraste con el paisaje de acantilados que dejamos atrás.

Voy cruzando el río…

Voy cruzando el río…

Sin embargo, las marcas siguen siendo constantes y el camino es fácil de recorrer. Tan solo habrá que tener precaución (mínima) las dos o tres veces que crucemos el arroyo. Y entre la hojarasca que tapizaba el suelo había un tronco caído del que brotaba un ramillete de setas.

Curioso ramillete de setas.

Curioso ramillete de setas.

Un kilómetro después de adentrarnos en el bosque, salimos de él, pero ya en Plentzia, donde las marcas del GR nos llevarán, apenas un kilómetro y medio más tarde, hasta la estación de metro (Km 12,8), donde ponemos punto final a este ameno paseo entre Getxo y Plentzia.

Plentzia: final de la ruta.

Plentzia: final de la ruta.

¡Vuelta a casa con los deberes hechos!

Ficha de la ruta

Distancia: 12,8 kilómetros, hechos en 3 horas.

Dificultad: Ninguna.

Comentarios: Apta, literalmente, para toda la familia. Es frecuente encontrarse paseantes de todas edades en el tramo entre Aixerrota y Sopelana. Entre Sopelana y Plentzia, el camino tampoco tiene dificultad, aunque requiere de calzado adecuado para la zona de bosque.

Más información

Fotografías (Facebook): https://www.facebook.com/media/set/?set=a.284270888283214.63723.109203329123305&type=3

Track (Wikiloc): http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=2259592

Mapa GR 280 (Uribe): https://maps.google.es/maps/ms?gl=es&ie=UTF8&oe=UTF8&msa=0&msid=203000631266344368419.0004ba1f75e3f496d1c0f

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3 comments to “Desde Getxo hasta Plentzia. Un paseo entre bosques y acantilados”
  1. Hola 🙂
    Este fin de semana hicimos las dos rutas que proponíais: Desde Getxo hasta Plentzia (donde hicimos noche) y al día siguiente llegamos hasta Armintza. Sólo deciros que la zona «jungla» a la salida de Sopelana estaba casi impracticable. Nos hubiera ayudado un machete para abrirnos paso en el primer tramo 🙂 Por lo demás estuvo fenomenal. Gracias por vuestra página. Un saludo!
    Este es nuestro video de fotos de la excursión:
    https://www.youtube.com/watch?v=aPycRE1RR2M

  2. Hola,

    Acabamos de volver de la ruta propuesta, y como bien dice Pilar en el anterior comentario ( no lo leimos ayer…) sin machete no lo haces…
    Si estuvieran mas transitables ciertos tramos, desde luego una ruta genial. (Olvidaros de ir en bici en la zona jungla)

    Saludos!!

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